(Publicado en el Diario Información el 2/12/2014)
Primera guerra mundial, se encomienda a un grupo de soldados al mando de un veterano oficial la realización de una misión en el desierto de Mesopotamia. Dado el secreto con el que deben realizar dicha misión, solamente el oficial conoce los objetivos de la misma. Desgraciadamente para el grupo de soldados, el oficial es asesinado a distancia por unos bandidos, por ello deben vagar por el desierto sin conocer el plan que deberían ejecutar ni la forma de regresar a su base, mientras son hostigados por un enemigo invisible que va acabando uno a uno con ellos.
Esa es la sinopsis de ”La patrulla perdida”, una de las menos conocidas películas del gran John Ford. Pero al hablar de un grupo de personas sin mando ni rumbo podríamos también referirnos al actual equipo del Partido Popular en Alicante. Quedó de manifiesto en el pasado pleno de Noviembre que ya no hay iniciativa política en el actual equipo de gobierno, y que ya ha empezado, al igual que hacían los soldados de la película de Ford, el “sálvese quien pueda”.
La alcaldesa de la ciudad, Sonia Castedo, decidió dar un soliloquio en el reiteró su inocencia ante las graves acusaciones que le hacen, y según mi pensamiento, seguir confundiendo la responsabilidad política con la judicial. También se desmarcó de su actual partido indicando que no repetirá como cabeza de lista. Hábilmente, volvió a remarcar que no sería la cabeza de lista del Partido Popular, pero en ningún caso que no lo iba a ser por otra opción política. Ignoro, si es una opción que realmente considera o si por otro lado prefiere, tal tahúr de póker, tirar un farol para negociar con más fuerza con los que todavía son sus compañeros o al menos, comparten carnet de partido.
Lo que es evidente es que como pasaba en la película de Ford, al faltar la persona que debería organizar el grupo, este deja de ser un equipo para pasar a ser una banda. Si Castedo hubiese dejado la alcaldía una vez fue imputada, es posible que el Partido Popular hubiese podido reconducir en algo la situación, pero al haber seguido manteniendo en total debilidad a su máxima representante ya no ha habido ninguna opción. Avergonzados desde Madrid y Valencia de la máxima representante de la ciudad, no ha habido apoyos, más bien todo lo contrario. Y en Alicante no ha habido ni voluntad, ni capacidad de enfrentarse a los graves problemas de la ciudad y simplemente el equipo de gobierno se ha limitado a ratificar la concesión de las contratas más importantes a los de siempre y a seguir dejando que una ciudad con unas posibilidades impresionantes funcione por sí sola. No han puesto encima de las mesas acciones significativas para potenciar el turismo, ni para resaltar los elementos culturales de la ciudad, ni para atraer empresas, ni para ayudar al comercio, ni potenciar relaciones con la Universidad o con el Puerto…
Ahora la única opción que han puesto encima de las mesa, es concentrar prácticamente toda la escasa inversión que han realizado en la ciudad en tres meses, poco antes de elecciones para que así parezca que dejan algún legado. No obstante esta inversión es insuficiente e incluso indigna si se compara con la inversión que se realizan en cualquier otra ciudad de similares características.
Como los soldados de la patrulla perdida, cada concejal lucha de manera individual intentando brillar con el escaso presupuesto que les ha dejado el que se ha quedado con la mayor parte del mismo. Mención aparte la merece el grupo socialista, mientras su candidato para las próximas elecciones, Gabriel Echavarri, refuerza su equipo con todo “lo mejorcito” del Partido Popular y olvida a sus concejales, estos se dedican a faltarse al respeto los unos a los otros sin rubor ya en el mismo pleno.
Da la sensación, que ni PP, Ni PSOE, ni EU quieran utilizar el pleno, los primeros imagino que planifican desde la junta de gobierno, hacer todas las inversiones que puedan a pesar de que puedan dejar hipotecada la ciudad, el PSOE sigue utilizando los plenos para mayoritariamente presentar iniciativas de ámbito nacional y desde EU para ganarse un hueco en alguna tertulia televisiva.
Yo considero, que la legislatura no está acabada, que no se pueden tirar por la borda estos meses que quedan y que hay que seguir haciendo propuestas por y para la ciudad, y llegar a acuerdos como el de la comisión para hacer el seguimiento de la contrata de limpieza, o el consultorio en la zona de Séneca o para ser mucho más transparentes en la gestión de dinero público entre otras cosas que llevamos al pleno pasado. Y que, cómo algún soldado de la patrulla perdida hace, hay que enfrentarse decididamente a los problemas y no esperar a que estos acaben con uno.