El halago de tu rival


“¿Sabes que al alcalde de Alicante le van a dar un premio de apoyo al comercio?”. Miré a mi
interlocutor con poca sorpresa, solía ser habitual con el anterior equipo de gobierno que
alguna asociación premiara a los dirigentes de la ciudad, algunas veces de forma honesta y
otras con el objetivo de obtener mejor trato en un futuro. “Le van a dar el premio Benefactor
del comercio de Elche” siguió comentando mi interlocutor mientras con una enorme sonrisa
me enseñaba la página de un periódico.
La ironía estaba justificada, ya que la noticia indicaba que en la reunión constitutiva del
consejo del comercio de la vecina ciudad de Elche apuntaban que la decisión del alcalde
alicantino de cerrar los domingos la avenida comercial por excelencia de toda la provincia,
favorecía notablemente el objetivo, totalmente respetable, de que Elche pudiera pasar a
coliderar comercialmente la provincia.
Dos estrategias encima de la mesa. Mientras el asesor de comercio del tripartito alicantino
reiteraba que el hecho de cerrar Maissonave los domingos ponía a todo el comercio alicantino
en las mismas condiciones, los segundos estudiaban como aprovechar el error del tripartito
alicantino para poner en valor el comercio de su ciudad.
Hay algunos que todavía no se han enterado de que en un entorno de libre mercado, tus
éxitos vienen de tus aciertos y de los errores de tu competencia. Tampoco de que la economía
está globalizada hasta los más pequeños detalles y de que la mejora de las comunicaciones y
medios de transporte así como el crecimiento imparable del comercio electrónico son unas
variables que hay que tener en cuenta a la hora de plantear modificaciones en el comercio de
tu ciudad.
Sin ninguna inversión pública se había conseguido un modelo comercial interesante y rentable,
copiado y todavía mantenido en Valencia. En pocas semanas se vendrá abajo el esfuerzo de
estos años, ya que el tripartito no ha puesto ninguna alternativa sobre la mesa, y es que
construir es mucho más difícil que destruir.